El corazón de una madre, el latido más fuerte del mundo.
Si existe un vínculo que nos une de manera directa con nuestra madre, es sin duda, el primer latido. Este sonido es la conexión más pura, fuerte y mágica en la que dos corazones laten al unísono como si de uno se tratara.
Antes de nacer somos capaces de percibir los sonidos pero, gracias a la naturaleza humana, la vibración sonora que percibimos con mayor fuerza es el amor de nuestra madre transformada en su voz. Jugar, cantar, sonreír, comer son sonidos cotidianos que de niños nos estimularon a descubrir un mundo nuevo… Por otra parte, un suspiro, un susurro, un beso suave, el contacto de piel con piel madre e hijo fueron sonidos que lograron calmarnos cuando lo necesitábamos.
Esos sonidos nos acompañarán a lo largo de nuestras vidas en forma de palabras, canciones, olores, caricias, abrazos y momentos que se quedarán impregnados en nosotros para siempre. Momentos únicos que quedarán recopilados para siempre en una nueva joya Mumit.
Desde el momento que una madre lleva a su hijo dentro de su vientre su corazón late con la fuerza del amor, con la pasión y el compromiso de cuidar y proteger a su hijo, lo que hace que esta conexión sea única y profunda, es como si mamá e hijo hablasen el mismo lenguaje.
La campaña del Día de la Madre con Lucía Bárcena como protagonista transmite los sonidos más icónicos a través de diferentes vídeos ASMR que podrás encontrar en nuestras redes sociales, sonidos que involucran momentos y se abrazan por joyas que le unen con su pequeña Filipa y con su nueva bebé.