Las perlas y sus codiciados reflejos holográficos son una tendencia que nunca pasa de moda. En MUMIT, hemos reinventado la perla y su uso en joyería llevándola a nuevos extremos. La colección Mabi Blet en la que la perla se convierte en protagonista, está inspirada en su belleza minimalista reinterpretada para la mujer de hoy: natural, elegante y moderna.
Si te estás planteando adquirir una maravillosa joya de perlas, en las siguientes líneas nos adentramos en el fabuloso (y desconocido) mundo de las perlas.
¿Qué tipos de perlas existen?
Existen dos clases de perlas: de origen natural y de origen no natural. Todas las perlas MUMIT son de origen natural.
Perlas Naturales
Las perlas naturales se obtienen directamente un ser vivo, básicamente ostras. Cuando un cuerpo extraño se introduce en el interior del molusco, como mecanismo de defensa, éste reacciona cubriendo lentamente la partícula y creando capas de nácar, una sustancia cristalina y lisa. Debido a su origen totalmente natural, cada perla es única e irrepetible.
Dentro de las perlas naturales existen dos variedades, aquellas que se obtienen directamente de un ser vivo sin mediación del hombre y aquellas en las que interviene la mano del hombre en su creación, también conocidas como perlas cultivadas. El proceso de creación de las perlas cultivadas es el mismo, el hombre introduce un cuerpo extraño en el molusco y éste se defiende. Suelen tardar en crearse entre 6 meses y nueve años.
Las perlas naturales son consideradas como piedras preciosas, además a diferencia de las gemas, las perlas no necesitan ser pulidas para su utilización en joyería.
Perlas No Naturales
Las perlas artificiales o de origen no natural, no se utilizan en joyería fina ya que son fabricadas en laboratorios y carecen de valor. Este tipo de perlas se utilizan principalmente en bisutería.
El Valor de Una Perla
Cada perla es única e irrepetible, encontrar dos perlas iguales es casi imposible. Este factor es el responsable de los límites a la hora de clasificar de forma general el valor de una perla. Las perlas naturales son las más valoradas, se dice que para encontrar una perla natural hay que abrir entre 15.000 y 20.000 ostras, por lo que algunas de ellas pueden llegar a tener un valor incalculable.
Si se examina con detenimiento una perla, se pueden determinar ciertas características comunes como el tipo de perla, el tamaño, su color, forma, brillo y superficie o lustre. Estos matices ayudan a clasificar una perla, pero no determinan su calidad, ya que es el conjunto de estos lo que determina su belleza y consecuentemente su valor.
Además del conjunto de matices estéticos, también influye en el valor de la perla su origen y la larga duración de esta. En cuanto a su origen, se pueden encontrar perlas Austalianas, perlas de río o freshwater y perlas Tahitianas entre otras.
Desarrollaremos en profundidad todos estos factores en un siguiente post, ya que el conjunto de todos es determinante para calcular el valor de una perla.
Ahora que conoces mejor el mundo de las perlas, te invitamos a vivir la reinvención de la perla en joyería de la mano de MUMIT.
